SOBRE TELEPERFORMANCE Y EL TELEMARKETING

Escribo estas lineas porque he visto la inquietud real de muchos compañeros en ayudar a los trabajadores de teleperformance que van a ser sometidos a un ERE. Sin embargo mi intención no es tanto hacer un alegato a favor de los trabajadores que van a perder sus empleos y su forma de ganarse la vida, que por supuesto han tenido y tienen toda mi voluntad con ellos, como arrojar un poco de luz sobre este sector a veces un tanto desconocido, y que para cuando hemos querido parar la vista en él ya está perdido.

Aunque la técnica del ERE es quizás uno de los ingratos resultados posibles de la crisis actual, la realidad que se sustenta detrás de todo esto es mucho más antigua, y difiere enormemente de problemas asociados a caidas de demanda o consumo que pueden llevar a una empresa a tener que reducir plantilla.

El problema del sector comienza a partir del año 1996, a partir del cual se dan una serie de circunstancias que posibilitan generar un sector amplio de trabajo sobre bases completamente precarias. Las circunstancias en concreto son de una parte la privatización de Telefónica, la introducción de operadores alternativos y operadores móviles, y lo más importante una reforma que tras la intención de flexibilizar de origen el mercado laboral, a través de tecnicas neoliberales como el outsourcing, lo que encerraba era un despido más barato y sobretodo y ante todo legitimar de forma sistemática algo que en la anterior legislación hubiese sido completamente condenable: La cesión ilegal de trabajadores.

El primer caso el de la privatización de telefónica supone un paradigma dentro de la historia de las telecomunicaciones a nivel europeo, pues no solo se privatizo la estructura y la empresa como negocio, sino que se añadio toda la red de telefonia que habían pagado millares de españoles. Esto supuso a nivel interno la aplicación de despidos selectivos que aún hoy van limpiando la vieja plantilla con sus derechos consolidados, la generación de una corporación que utiliza técnicas verdaderamente predatorias fuera y dentro de nuestro pais en el plano empresarial, pero sobre todo genero una situación de preponderancia sobre aquellos operadores que para ser competitivos se vieron forzados a reducir los costes de servicio al mínimo, para ser "competitivos". Se han tenido que esperar años para que Europa tras sucesivos tirones de oreja, hallan llevado a España a cambiar y permitir técnicas como el unballding o desagreción de nucleo de bucle, al la limitación de costes por subcontratación de lineas etc... Sin embargo en el plano que nos interesa, el de los trabajadores, supuso básicamente el nacimiento de un sector que se desligaba de los derechos consolidados por los que hasta entonces eran la mayoría, es decir los de telefónica. Se comenzo la andadura, sin derechos y con una intencionalidad por parte de la patronal de no permitir ni fomentar la estabilidad.

En esos años con la llegada de nuevos operadores se produce la gran paradoja, esas empresas desligan sus servicios fijos y continuos como son la atención al cliente, servicios técnicos, departamentos de captación comercial a terceras empresas, que bajo el marco del contrato por campaña (jamás entenderé como un servicio que se da siempre de forma permanente puede estar sometido a una delimitación temporal por una supuesta campaña). Esto permite un intercambio rotatorio de las empresas de telemarketing que trabajan para una y otra compañia, es decir el mismo departamento de vodafone a trabajado para teleperformance, qualytel, sitel... y las distintas plataformas han rotado incluso por el territorio nacional. ¿Que conseguían estas empresas con eso?, al no tener personal fijo las operadoras se evitaban los costes que los derechos consolidados podían dar lugar, además que evitaban el efecto que cualquier tipo de movimiento sindical pudiera intentar, si el servcio se paralizaba en una plataforma como consecuencia de una huelga, el trabajo era asumido por otra y la empresa que no tenía controlados a sus trabajadores era incluso sancionada. ¿que ocurría con las empresas de telemarketing? Pues que con la técnica de la rotación cada X años, se libraban de todos aquellos trabajadores que ya estaban asentados y con sus derechos, sin embargo al retomar una campaña distinta su volumen de negocio nunca llegaba a disminuir. Que otras barrabasadas se han echo, pues el uso de la obra y servicios determinada, planteemoslo de otro modo, estas empresas cada vez que contraban a un trabajador que estuviera en paro cobraban una serie de ayudas y subvenciones, con lo cual ¿para que tener a un trabajador durante años si salía más rentables hacer renovaciones parciales de gran parte de la plantilla cada tres meses?.

Esto que he descrito, el outsourcing no ha sido sino una forma de enmascarar lo que hasta el momento se consideraba una sesión ilegal de trabajadores, todo sea dicho que formalmente y de cara a la administración ya sea por acción u omisión todo estaba perfecto.

Pero que ocurre, pues que inevitablemente con los años se van consiguiendo a través de distintos convenios colectivos mejoras, avances en derechos, travas para la cesión pura y dura y para el uso de formulas contractuales dudosas, es decir el sector con todos sus pesares se iva aposentando, incluso en caso de cesión de un servicio estable la nueva empresa estaba obligada a abosrver a parte del personal de la anterior... Creo que temporalmente nos encontraríamos en este punto sobre el año 2003 o 2004.

Aqui es donde estas empresas generan la nueva formula la deslocalización internacional, es decir abren plataformas en paises de habla hispana, pero que por sus caracteristicas geopoliticas les permiten tener a los trabajadores en situaciones peores que las del sector en España en su origen en el 1996. Estamos hablado que en las plataformas en sudamerica de Qualytel se hacían jornadas de 10 y 12 horas, sin descansos ni paradas visuales, con unos salarios infimos, y sobre todo sin ningún tipo de aspiración de lucha social por parte de sus trabajadores, pues toda acción organizativa era reprimida con despidos directos. Nos habíamos adentrado en el año 2007 y el proceso era imparable.

Para que veáis el ejemplo de la iniquidad que esto representa con un poco de más claridad, traslademos la situación a los impuestos, si nosotros para saltarnos las leyes españolas metemos el dinero en una cuenta en suiza, esto estaría tipificado como delito fiscal, aqui en vez de meter dinero en otro pais más ventajoso, lo que se hace es meter trabajo y personas en situación de precariedad, creo que dicho así parece hasta más grave...

En esa época cuando aquí en las plataformas entre gente concienciada se ve la situación se empieza una batalla que perdimos contra la deslocalización internacional. Recuerdo con ironía como me contaron que cuando se pidio una charla con un director de departamento del ministerio de trabajo la contestación del hombre fue: "entonces vosotros que sois los de la teletienda... es que yo lo del telemarketing no acabo de saber que es..." . Ni que decir tiene cuales fueron el resultado de esas conversaciones, ninguno. Sin embargo no achaquemos la perdida de viejas batallas solo al sistema, o a las empresas, fue la propia sociedad, los propios compañeros que trabajaban de teleoperador los que dierón la espalda a ese problema y no respaldaron las movilizaciones. Hoy me pregunto con cierta ironía ¿donde estabais todos los que vais a ir a ayudar a los trabajadores de teleperformances en las manifestaciones que intentaba atajar la causa de dichos problemas? Rascadoos las llagas de sofa seguramente, o en otras luchas unidireccionales que nos impedían ver la necesidad ajena.

Al menos hoy nos plantamos para ayudar a los compañeros que van a sufrir un ERE, y espero que seamos muchos los que vayamos a ayudar, sin embargo quiero que seais concientes de que el problema no es un ERE, que en el fondo no es sino una forma de darle al empresario la posibilidad de un despido libre, sino que veais la realidad que esta detrás de todo esto. Ese servicio que ahora se va de sevilla parcialmente no desaparece, simplemente se trasladará a algún pais en el que puedan explotar más a los trabajadores y reducir los costes para seguir viviendo de la sopa bova de los beneficios conseguidos con técnicas leoninas.

Salgamos a ayudarles, gritemos e intentemos que nuestra voz se escuche, pero luchemos también porque estas practicas empresariales sean abolidas, desde la conciencia, desde el conocimiento de la situación alcemos nuestra voz como miembros del 15 m, para que los que especulan con la vida de los demás y con los derechos de los trabajadores sepan que van a tener al menos a una sociedad unida que no los va a respaldar más.